Cómo Instalar una Cornisa de Yeso

La cornisa es una de esos detalles decorativos que ofrecen un gran resultado con un esfuerzo relativamente bajo. Aquí te explicamos el proceso de instalación y los materiales necesarios

La instalación de una cornisa de yeso es un trabajo de bricolaje poco complicado, sólo requiere de un poco de paciencia y cuidado. Para la instalación necesitamos masilla y tacos Fisher.

Las cornisas son molduras que conforman el remate superior de un mueble, edificio, habitación, pedestal, etc. En interiores sirven como elemento de unión entre a pared y el cielorraso, aportando armonía al conjunto. La cornisa de yeso es un elemento de fácil colocación, que no requiere conocimientos especiales ni herramientas específicas.

Para la instalación de una cornisa de yeso debemos determinar las características de las paredes y el techo, deben estar perpendiculares y las paredes deben mantener la verticalidad y ser planas, mientras que el techo debe ser horizontal, de lo contrario, la cornisa no apoyará plenamente sobre las superficies. En este caso, deberemos rellenar los huecos.

Debemos eliminar toda clase de recubrimiento del sector en que vamos a instalar nuestra cornisa, para que la adherencia sea perfecta.

Cómo instalar una cornisa de yeso

Lo primero que debemos determinar es el número y tamaño de las piezas a colocar, de manera que tengamos la menor cantidad de uniones posible. Para los rincones, realizaremos el corte de las piezas a inglete para su ensamble.

Materiales

  • Cinta métrica
  • Nivel, martillo
  • Taladro con diferentes brocas
  • Sierra y caja de ingletes
  • Tela protectora
  • Masilla para madera
  • Pintura
  • Pinceles

Cortamos las piezas del largo necesario para cubrir la habitación, realizando los cortes con la ingletera para ensamblar las piezas.

Empleando el nivel marcamos sobre la pared la posición de la cornisa y las perforaciones necesarias para amurarla.

Haremos la instalación empleando tacos Fisher y masilla, para lo que debemos practicar los orificios con el taladro. Instalamos todos los tramos de cornisa cubriendo las piezas con la masilla y luego atornillándolas.

Para cubrir los huecos notorios utilizamos masilla, en los huecos de los tornillos y en los que se formen por diferencias con la pared.

Realizaremos un rayado sobre las superficies en las que se colocará la cornisa, para lograr una mejor adherencia.

Finalmente aplicaremos el material de acabado sobre las uniones de las distintas piezas y sobre las coberturas de los tornillos, para que no se noten. Luego de aplicar el acabado, retiramos el exceso con una esponja húmeda. En caso que sea necesario, lijaremos.